miércoles, 12 de mayo de 2010

Al desierto

Al desierto, donde no rugen los leones y las bestias comen de tu mano. Calcinarse, vivir, encontrar las virtudes de la arena. Los espejismos son verdad, existe lo que vemos.

3 comentarios:

Olga Bernad dijo...

A veces son verdad, y a veces son mentira. Como la vida misma;-)
Pero el desierto es un estado especial, sí, "Calcinarse, vivir, encontrar las virtudes de la arena..."
Me gusta mucho este texto pequeño, en general me gusta bastante la última serie.
Saludos.

Jesús dijo...

Gracias, Olga. La verdad es que esta última serie me está costando un riñón y la mitad del otro. Pero es lo único que me sale ahora.

Olga Bernad dijo...

Ay, esa sensación casi física de dejarse algo, sí;-) pero ojalá no lo sintieses como una pérdida, no importa lo que nos cueste. Lo que nos vacía nos limpia, yo creo que sí, nos abre espacios en blanco, espacios desiertos... Imprescindible para que más tarde tal vez "salgan" otras cosas, porque les hemos abierto espacio para entrar.