domingo, 23 de agosto de 2009

Y tú, hambriento

Te digo: “Lo dejo todo en tus manos, Señor”, pero no dejo nada, todo en mis manos y tú, hambriento.

2 comentarios:

Máster en nubes dijo...

Me gusta mucho esto, Suso, mucho, tengo para toda la semana con una frase como esta tuya, con una oración así. Muchísimas gracias, eres un solllll

Jesús dijo...

Gracias muchísimas a ti.