jueves, 17 de abril de 2008

La sonrisa


La sonrisa en un rostro es siempre puerta abierta e invitación a entrar por ella, hasta el corazón de quien sonríe. Quien nunca sonríe, quien de tal modo sella su cara y así su persona entera, no cursa invitación alguna a morar en él sino que expulsa a todo posible huésped.

6 comentarios:

Juan Antonio González Romano dijo...

Las sonrisas nunca son falsas: son falsas las personas que sonríen de mentira. Las sonrisas de verdad siempre nos abren la puerta de la alegría o del consuelo, y así es más llevadero vivir. Feliz, incluso, a veces.

Jesús dijo...

"A veces", sí, a veces. Que sean muchas esas veces, Juan Antonio.

Anónimo dijo...

La sonrisa es la luz del mundo. Por una sonrisa un cielo, ya lo dijo Bécquer. Y si el beso viene después, no digamos.

Jesús dijo...

¡Qué venga, qué venga el beso! "Yo no sé que diera por un beso".

Jesús dijo...

Muchas gracia, pen drive.
Un saludo

Anónimo dijo...

Hay sonrisas verdaderas, pero otras son traicioneras, e ahí el gran dilema de cuando y como saber cual es la buena.
Ricardo