En una entrevista de hace ya algunos meses, el estupendísimo actor Alfredo Landa nos dejaba turulatos cuando leíamos que se dirigía a Dios llamándolo ¡¡Manolo!!: « Muchas veces, cuando reparo en las injusticias que veo a mi alrededor, me cabreo con Manolo y le digo: “¡Oye, Manolo, estoy hasta los cojones! Eres sapientísimo, misericordioso, buenísimo… ¡Echa una mano, joder!”» . ¡Qué cristiano es esto, sí, qué cristiano, esta familiaridad inusitada, este tuteo tan sandunguero y tan vivo! Será que la gracia, a la par que agraciarnos, nos hace graciosos, nos regala un tú a tú con Dios en el que, como hijos verdaderamente suyos, podemos y hasta debemos tratarle como a un colega con el que nos tomaríamos una caña espumosa. Y es que Dios, por ser Señor, nuestro Señor, es también y por eso mismo el amigo que se acoda en la barra y entrechoca con la nuestra su jarra de cerveza. “No os llamo ya siervos … a vosotros os he llamado amigos” (Jn 15, 15).
7 comentarios:
Tu baúl guarda cosas preciosas. Gracias por sacarlas.
Gracias a ti, Lolo.
Sí, de charla en el bar de sus atrios, que ya lo dice el salmista: prefiero un día en ese bar, que mil en mi casa.
De todos modos lo de Landa lo veo yo más cerca del A.T. y de ese Dios del que no se puede pronunciar el nombre, en vez de Yahvéh él dice Manolo, pero sandunguero de verdad me parece más llamarlo padre. Aunque irá en caracteres...O en costumbres: Si le hubiera llegado un día al mío diciéndole "Enrique, tío, a ver qué pasa que no te enteras", se habría calado las gafas para verme la pupila por si venía fumada. Y por cierto, creo recordar que alguien me explicó una vez que el Abba de Jesús no es "Padre", no es la misma palabra que utiliza cuando les enseña a rezar "Padre nuestro...", sino que es algo así como papaíto ¿Es verdad, tú sabes si es así?
Tiene razón Lolo, es un baúl para robarlo y llevárselo a casa.
Por lo que yo sé, la palabra "abba", en efecto, tiene ese significado entrañabilísimo de "papa" o "papaito".
Sobre el tema del "Manolo", creo que tanto mi reflexión como la tuya bien pueden ir juntas de la mano. No se estorban mutuamente, creo.
Y gracias, una vez más.
joé, ahora entiendo porqué me está entrando ese gustillo por los atrios con lo bala perdída que soy.
barra libre, una buena pinta de cerveza y pegar la hebra con el jefe, qué más quieres.
Yo le llamo el jefe.
Pues eso, ¿qué mas queremos? El banquete eterno en el cielo bien pudiera ser, y lo será, eso que tú describes tan gráficamente, Nacho. Gracias.
El nombre de "Manolo" es perfectamente adecuado: tal es el nombre que, según la indicación del Ángel, se le tenía que poner al hijo de María.
(Athini)
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