viernes, 11 de abril de 2008

Poesía

Poesía: purgatorio de las palabras profanadas, taller de los verbos quebrantados, balneario del lenguaje deprimido.
Poesía: cielo, al fin, para las "palabras, palabras, palabras" de un Hamlet redimido.

2 comentarios:

Juan Antonio González Romano dijo...

Ah, las palabras de la tribu rescatadas. Ah, Mallarmé.

Jesús dijo...

Infórmame sobre este apunte, querido Juan Antonio. Mi saber no alcanza.